Se va el 2024... Un adiós al año es un pequeño fractal de los tantos adioses a aquellos que se fueron... como las flores, que durante un tiempo nos llenan la vida de color y perfume, y un día se van, dejando un paisaje cambiado. Esas flores que se fueron nos dejaron semillas en el corazón, aunque extrañamos su aroma... Y la vida te presenta nuevos momentos, nuevos brotes, nuevos desafíos, que te impulsan a seguir, recibiendo nuevas floraciones... Veamos qué colores traerá el 2025... Abrazo grande para todas y todos los que no veo hace tiempo... Un cariño largo, para que sepan que aún los tengo en el corazón... aunque no podamos vernos personalmente... porque tengo esa particularidad de quedarme siempre lejos y al mismo tiempo sentir que hace poco que vivimos eso que nos pasó en algún momento de la vida... Que sigan floreciendo en la tierra y en el cielo... Alejandra Lucía